Pese a las especulaciones que se hicieron en las horas previas, la gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner, finalmente participó de la reunión que se realizó a partir del mediodía con el presidente Mauricio Macri y otros mandatarios provinciales en la Quinta de Olivos. La participación de la hermana del ex presidente Néstor Kirchner había sido puesta en duda en las últimas horas en medio de la coordinación de su agenda provincial.
La ex ministra de Desarrollo Social de la Nación había advertido el jueves tras asumir en el cargo que su provincia padecía serios problemas financieros. “Está quebrada en sus finanzas”, había dicho. Por eso, requería que el Gobierno de Macri siguiera asistiendo a ese distrito. “No queremos más una provincia dependiente del poder central. Pero gracias a la asistencia financiera que tuvimos estos años del gobierno de Néstor y de Cristina no caímos en el abismo”, había afirmado. “La masa salarial supera ampliamente los ingresos provinciales”, había añadido.
El diputado Máximo Kirchner, hijo de la ex jefa de Estado, había sido el primero en señalar a la prensa que la flamante mandataria santacruceña debía ir a la reunión con Macri “para escuchar y no tener prejuicios sobre el presidente”.